Qué es el "Go"
El Go (chino simplificado: 围棋, chino tradicional: 圍棋, pinyin: Wéiqí; japonés: 囲碁 Igo, coreano: 바둑 Baduk) es un juego de tablero estratégico para dos jugadores, nacido en la antigua China hace más de 2.500 años. Fue considerado una de las cuatro artes esenciales de la cultura china de la antigüedad. Las escrituras más antiguas que hacen referencia al Go datan de las Analectas de Confucio.
El Go es muy popular en Asia Oriental, pero también ha ganado cierta popularidad en otras partes del mundo. Llegó a Europa a través de Japón, por lo que es más conocido en ese continente por su nombre japonés. A mediados de 2008, había más de 40 millones de jugadores de Go en el mundo, la gran mayoría en Asia. La Federación internacional de Go cuenta con 74 países miembros.
Evidencias arqueológicas muestran que en los primeros siglos se jugaba en tableros de 17x17 líneas. Sin embargo, para cuando el juego se extendió por Corea y Japón cerca de los siglos V y VII D.C., respectivamente, los tableros de 19x19 ya se habían vuelto un estándar. El objetivo del juego —como la traducción de su nombre chino sugiere— es rodear con tus piedras un área mayor en el tablero que el oponente.
Durante el juego, los jugadores se alternan colocando piedras sobre las intersecciones vacías de un tablero de 19×19 líneas. Los principiantes usualmente juegan en tableros de menor tamaño, de 9x9 y 13x13. Las negras inician la partida colocando la primera piedra. Una vez colocada una piedra, ya no se la mueve por el resto del juego. Una piedra o cadena de piedras del mismo color es capturada y retirada del juego si después de una jugada no posee intersecciones vacías adyacentes, esto es, si se encuentra completamente rodeada por piedras del color contrario en todas sus intersecciones directamente adyacentes.
Al final de la partida, se puntúa --- se cuentan los puntos---, y el jugador que tenga mayor territorio (siguiendo las reglas) gana la partida. Existen diferentes formulaciones de las reglas del juego, pero todas concuerdan en los aspectos generales y las diferencias no afectan significativamente la estrategia ni el desarrollo del juego, salvo en situaciones muy excepcionales.
A pesar de que las reglas de Go son simples, la estrategia es extremadamente compleja. Por ejemplo, ubicar piedras juntas ayuda a mantenerlas conectadas. Por otro lado, colocarlas separadas hace que se tenga influencia sobre una mayor porción del tablero y abre la posibilidad de apropiarse de un territorio más extenso. Parte de la dificultad estratégica del juego surge a la hora de encontrar un equilibrio entre estas dos alternativas. Los jugadores luchan tanto de manera ofensiva como defensiva y deben elegir entre tácticas de urgencia y planes a largo plazo más estratégicos.
Una partida de Go completa de ejemplo: click aquí.